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Rubenvirtual... Bitácoras del pensamiento

El 28, el 28, el 28…

El 28, el 28, el 28…

Es una situación que he vivido otras veces bien sea por cosas trascendentes u otras que a la vista pueden parecer una trivialidad. Por ejemplo; La primera vez que me fui de viaje y más aún en ¡Avión! Con mi abuelo su esposa y un primo, conté largamente aquellos días en donde por fin tendría algo atípico, novedoso, increíble. Tenía entonces 12 o 13 años. 

Ahora es singular, irrepetible. Se ha marcado el 28 de Agosto como la fecha tope para que Ingrid y quién suscribe nos hagamos padres. ¿Alguien puede imaginar como será nuestro dormitar el 27 en la noche?

Resulta y acontece, que a juicio del doctor Gustavo Pagés quién ha llevado el control médico de Ingrid y su gestación y además; Tendrá la responsabilidad de guiar a este mundo "terreno" tras su estancia en el mundo "acuático" a nuestro hijo, la probabilidad de un parto natural ha decrecido notablemente. Como Asesor de Seguros que soy, y como viviente de esta Narcisa Venezuela; Me he mantenido alerta ante la real necesidad de solicitar una cesárea por mero gusto, por cuestión de "agenda" Pero cuando la medicina te dice que la posición "podálica" de nuestro hijo aunada a su peso que oscila en estos días en torno a los 3,3kgs. Hacen "Improbable" más no imposible que voltee a la esperada posición de espera para comenzar la puja ¿Qué puedes hacer? Esperar. Una espera que se hará larga pero hermosa al fin.

Ingrid tiene las incomodidades avisadas de los últimos días de gestación: Está y se siente pesada, sufre de hinchazones benignas en los pies, se cansa en varias posiciones, va al baño con la frecuencia de un borracho con cuatro botellas de "güisqui" en la sangre y tiene un dormir que oscila entre desvelos menores y un sueño profundo ocasional. Pero ¿En terminos generales? Está impecable, su barriga es una belleza, no parece un becerrito y mantiene la frescura del día a día. Por supuesto; Con la emoción en espera.

Han pasado cosas puntuales cómicas: Las especulaciones del nombre implican que mi suegro y un profesor y amigo de esta casa, encuentran que probablemente mi hijo se llame "Agustín" porque hemos decidido adjudicar el nombre del "santo" de dicho día al primogénito. ¡Ja! O sea, si nace el día de san "Telesforinatio" ¿Le pondríamos ese nombre?

Ha sido realmente divertido el tema del nombre y las especulaciones. Se decepcionarán al verificar que nuestro bebé tendrá un nombre nada especial ni rebuscado. Es sencillamente, nuestro nombre, su nombre.

Entonces y si la madre natura no puja para que ocurra antes, el Martes 28 horas después de un eclipse y avistamiento de dos lunas (En realidad del planeta Marte en visión extrema por su cercanía a la tierra) a eso de las 10:30am estaremos ingresando a la sala de partos de la clínica el Ávila para que iniciemos una nueva vida tras 10 años de ser un "dúo" convertirnos en un "trío".

No tengo realmente, letra literaria para hablar de otra cosa que no sea de nuestro advenimiento especial. Creo que para finales de este mes o Septiembre no tendré otro epicentro de ideas que no sea lo relacionado con nuestro bebecillo. He aprendido a no pedirle a Dios por aquellas cosas que los seres humanos podemos lograr con entereza y esfuerzo. Hago lo posible por pedirle por aquello que es naturalmente imposible y si bien la salud de Ingrid y el bebé en todo este tiempo de maravillosa gestación ha sido impecable, es obvio que uno no deja de pensar en imponderables. Entonces Dios mío, ilumínanos con tu bendición para que bebé, madre, padre y su entorno celebre a feliz término la llegada de un ser humano que será querido y guiado con la mejor intención posible.

Salu2

 

 

 

 

3 comentarios

Mariale divagando -

Amén!

Me parece perfecto que eviten los nombres rebuscados :-)

Sigo pendiente de Manzanito, vengo todos los días aunque no comente.

notme -

aahhh, que se ve muy linda Ingrid!!
Saldra todo bien, y estara el manzanito aqui cuando el quiera!! o/o/ con bendicion de todos! :)

Disfruten el momento!!!
xxxx