Leyendo al amigo Kiyosaki
Admito que una de las cosas negativas de Internet como medio, es que cuando te involucras demasiado en él; Descuidas otros placeres y hasta los suplantas. Es el caso de la necesaria lectura, esa que en ratos libres o como yo, antes de dormir; Enriquece y permite el crecimiento intelectual. En mi caso, decidí reencontrarme con una obra del muy famoso Robert Kiyosaki: De la serie padre rico, padre pobre he leído las 500 páginas de “Retírate joven y rico”
En principio, este señor no tiene empacho en admitir que es rico, muy rico. Y en esta obra explica su plan de acción para a los cuarenta y tanto años y usando una década de su energía, concentración y habilidad pudo convertirse en mil millonario.
Son 500 líneas de mucha inspiración, gran énfasis en el cambio interino de nuestras mentalidades para descongestionarnos de todo lo que implica nuestra crianza, los paradigmas, los condicionamientos y la habituación a tener un plan para “terminar pobre” el resto de nuestras vidas.
Mas allá de la credibilidad de Kiyosaki, por encima de sus enconados detractores que lo tildan de mentiroso, mercadotécnico y especulativo; Me ha encantado verme tan reflejado en muchas de sus palabras. Me ha dado mucho alivio saber que no soy el único que cree que somos realmente dueños de nuestros destinos, que no deberíamos obedecer tan ciegamente al criterio de “vivir empleados” y salir de la universidad pre asignados para conseguir un “buen empleo” sino con un criterio de crear una “RED” que permita al dinero trabajar en pos de nosotros y no lo contrario.
Conjunto a los muchos cursos y seminarios a los que he asistido desde el giro que le he dado a mi vida al volverme asesor de seguros, Kiyosaki forma una parte muy acertada de esa logia de escritores y analistas de la mente humana y de las capacidades internas del ser humano. Por encima de ideologías, temores a la abundancia (Cuando realmente la vida, dios y la naturaleza son ABUNDANCIA) el disco duro de resignación a llevar una vida no holgada sino sufrida y otras beldades que acompañan a nuestra existencia, Kiyosaki busca la desmitificación de que existe un “grupo nacido para hacerse rico” si bien no objeta que existan seres con peculiar “codificación genética” al respecto.
Mas que un libro de finanzas, de comprensión de oportunidades de las áreas bursátiles, de inversión, activos y pasivos así como compra de negocios y demás; este señor hawaiano busca que todos hurguemos en lo recóndito de nuestro ser para darnos cuenta que ¡Si se puede! Ser rico, o al menos se puede intentarlo (Que es en lo que ando) y mejorar tu status y visión de la vida.
Además de las observaciones que hace Robert sobre la pobre “educación financiera” que recibimos de todas partes desde que somos niños, este libro deberían leerlo (Y me imagino que todos los de su serie “Padre Rico Padre Pobre” ) aquellos quienes adosados a ideologías obsoletas en donde un “Héroe revolucionario mesiánico” suponen que su vida pende de un cambio celestial y político y que es la riqueza de otros la tragedia de tu pobreza… mental.
Por cierto ¿Saben porqué Padre Rico, Padre Pobre? Kiyosaki dice que tuvo dos padres: El biológico –padre pobre- y uno adquirido –el padre rico, muy rico- siendo este último quién moldeo el pensamiento de este singular individuo.
¿Charlatán? ¿Inspirador? No se, pero dudo que su lectura genere un efecto negativo y si un gran “destape” positivo… Así que ya saben en que ando…
Salu2
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