Yon...

Nuevamente, el humor negro, satírico, ingenioso y elegante de Laureano Marquez, pone en perspectiva esta satírica y rigurosamente verídica realidad con ese chico que irrumpió cual superhéroe en la escena sociopolítica venezolana...

"Ya el nombre sonaba a Imperio, a CIA. Por más que digan que viene del País Vasco y que el apellido delata su origen ibérico porque todo apellido que suene a ’agárratedelagarrocha’ es indudablemente de Euskadi, Yon Goicochea no engaña a nadie. Sus actitudes son las típicas actitudes de un fascista, su mirada, la típica mirada de un agente de la CIA y esa manera de hablar suya, en la que hay perfecta coordinación entre sujeto, predicado y tiempos verbales, delatan sus intenciones golpistas.

 Yon Goicochea es un pésimo ejemplo para la juventud venezolana. En primer lugar, deja la comodidad de las aulas para asumir la defensa de la libertad de expresión a raíz del cierre de RCTV. En vez de quedarse cómodamente en su salón esperando graduarse para luego conseguir trabajo y vivir una vida normal en un apartamento normal o, mejor, inventarse un guiso para forrarse de billete en un negocio con algún funcionario público, decide arriesgar su comodidad, su vida y la tranquilidad de su familia para luchar por la colectividad, por los derechos de todos, por los derechos incluso de aquellos que no saben que él está luchando por sus derechos y hasta por los derechos de aquellos que le parten la nariz de un coñazo y que ignoran que también por ellos es la lucha.

 Después, en vez de hacer como hace todo el mundo que manda a los otros como carne de cañón y se queda él en la retaguardia o en el comando estratégico dirigiendo las operaciones, va y da la cara y se pone con sus compañeros del movimiento estudiantil al frente de las protestas, pateando las calles y echándole un camión y chupando gas lacrimógeno como un mismo pendejo. Encima comienzan a desarrollar actividades de protesta inteligente, no agresiva y pacífica en un momento en el cual los mensajes son todos de guerra, enfrentamiento, comando y batallones.

 Como si todo lo anterior no fuese suficiente, la guinda de la torta: Se gana el premio Milton Friedman a la libertad, un galardón que va acompañado de 500 mil dólares americanos y qué hace: En vez de comprarse una casota y una Hummer y gozar un bolón botando los reales en aguardiente, sexo y discotecas como manda el espíritu de los tiempos, el tipo va y dona el billete para la creación de una escuela de líderes para las nuevas generaciones estudiantiles.

 Yon, eres verdaderamente despreciable.

 Gente como tú nos hace sentir mal a todos. Tú usando tus bienes privados para servicio público, en una sociedad en la que lo normal es usar los fondos públicos para el beneficio privado. Razón tienen los que dicen por ahí que esos reales son para un golpe de Estado (Que viendo bien las cosas, ni tan caros les salimos a la CIA). Yon, si este país llega a caer en manos de gente decente que no se robe los dineros del Estado, que respete a sus adversarios sin insultarlos ni ofenderlos, que se preocupe sinceramente por el bienestar de la población, y no en la concentración egocéntrica y onanista del poder, y que coloque él en los puestos de conducción del país a los más capaces y preparados, será entera responsabilidad tuya y de gente como tú.

 Allá tú con tu conciencia.

 Es que cuando veo gente así, lo que me apetece es dejar esta vida de sacrificio, entregarme por completo a la maldad, convertirme en un rufián.

 

Por: Laureano Márquez. (humorista venezolano)
para mis amigos del exterior que no conocen a Yon:http://www.caracasnine.com/cgi-local/content.cgi?l=esp&n=2