Una vida normal

Tenía días que quería hacer esto, pero una conocida lo hizo en "facebook" y me ahorró el "Copy-paste" me refiero a poner en consideración este estupendo artículo de Rafael Osio Cabrices que salió publicado creo que hace par de semana en la revista dominical "Todo en Domingo" del rotativo "El-Nacional"  en donde la columna "La vida sigue" ofrece interesantísimas revisiones de la sociedad venezolana y otros topicos. Para precisar, yo invito a quienes lean que concluyan si realmente llevamos una vida y como era esta vida antes de 1998. Buen punto para cuando este domingo tenga que tomar una decisión...

Imaginate que no tengas que preguntarte, cuando te levantas, cómo amaneció el país. Que no tengas que escuchar o mirar los noticieros, o consultar los sitios de internet de los medios varias veces al día, para enterarte del último sobresalto: alguna ley atemorizante que haya aprobado la AN, algún nuevo llamado a la guerra, un anuncio más de que hay una tenebrosa conspiración en marcha.

Imaginate que el gobierno no quiera reclutarte para que emules a los lanzeros de Páez o a los barbudos de Sierra maestra, sino que se dedique a proteger tú vida y a trabajar por tú bienestar, y que la "oposición" se dedique a promover SOLUCIONES a los problemas en vez de estar contestando por tv cada insulto que lanza el presidente.

Dime si no sería fantástico que tú relación con los asuntos nacionales no sea como ser un pasajero del TITANIC: lo único que se quiere es meterse en un bote, mientras suenan gritos y alarmas por todas partes antes de que esto se termine de hundir.

Que chevere sería no tenerte que preguntarte con cierta frecuencia si te quedas en tú país o huyes de él. Ni hablar de como mejoraría tú existencia si un palo de agua no te hiciera pensar en una cola interminable o una innundación, o si no entraras en pánico si un ser querido no atiende el celular por varias horas, durante las cuales te pasan por la mente toda suerte de escenarios trágicos.

Seguramente te gustaría viajar al exterior con el DINERO QUE TE GANASTE HONRADAMENTE, SIN TENER QUE DAR EXPLICACÍONES POR EL, Y AL REGRESO HACER LA COLA DE INMIGRACIÓN SIN MORTIFICARTE CALCULANDO LOS DESASTRES QUE HABRÁN OCURRIDO EN VENEZUELA, durante la ausencia.

Se nos ha convertido en un lujo de excéntricos el derecho a desconectarnos de lo que está pasanso, en una decisión polémico al no querer leer más los periódicos. Es algo que puede generar culpa en quien lo asume y desaprobación de los demás, aunque sea un camino ya muy común entre mucha gente. Pero no debería ser un problema eso, es decir, que estar tranquilo no implique evadir la realidad, darle deliberamente la espalda. Que uno pueda alcanzar cierta serenidad de conciencia y de espiritu sin tener que ser un monje zen.

Y además como sale gratis soñar, como canta Joaquin Sabina, sueña con que tuvieramos una vida normal. Con que las balas perdidas o teledirigidas, los estallidos sociales, la impunidad casi absoluta, los políticos delincuentes y los gobiernos que te ven como enemigo sean temas de películas o de los libros de ficción.

Sueña con que las prioridades de uno sólo sean trabajar o estudiar, cuidar de tú familia, aprender a hacer las cosas que te gustan, disfrutar de tú tiempo libre, y no pasarte el día y la noche pensando en que se va a ir la luz, se acabó la leche o el que viene detrás de ti en la acera puede asaltarte. Una vida normal para personas normales, no para heroes ni victimas.

Para seres humanos que lo que quieren no es entrar en la historia sino ver cumplidos sus modestos y humanos sueños: un trabajo digno que permita resolver las necesidades y darse algún gustico, una familia sana y razonablemente feliz, una casa cómoda y segura.

Imaginate si tuvieramos, si tuvieras, una vida normal en la que sea posible apostar por el futuro. No un presente exasperante que te tiene corriendo y aterrado como un animal perdido".

 Rafael Osío Cabrices

PD: La imagen de Jack Bauer, es para recordarle que se necesita un tipo como él, para tener ¿Tranquilidad?